Comprar vuelos a Viena baratos ahora resulta mucho más fácil con Reservalis. Esta ciudad insignia de la música, una de las más bellas y bohemias del mundo y la eterna ciudad neutral, ha sido el principal punto de sostenimiento de la cultura mientras el resto de Europa agonizaba en las Guerras Mundiales. Ante una situación cambiante, Viena siempre se ha mantenido como la alternativa para artistas en el exilio o que se encontraban faltos de inspiración. De hecho, el artista – actualmente también el turista – llega a Viena a sabiendas de que cuando regrese de su viaje, nada será lo mismo. Reservalis ofrece grandes ofertas en: Vuelos Madrid Viena y Vuelos Barcelona Viena

1. Porque es la capital de la música. Esta ciudad ha criado al compositor de compositores Wolfang Amadeus Mozart. Entre sus principales atributos se encuentra la ópera de Viena, conocida como la más famosa del mundo justamente por haber albergado las mejores óperas de decenas de países y compañías diferentes. Un paseo hacia las raíces de la música del siglo XX que logrará que hasta los más imperturbables se consigan emocionar.

2. Porque tiene más tesoros barrocos que cualquier otra. Un recorrido por el palacio Belbedere o los palacios de invierno pueden significar el renovado interés por el espíritu barroco de los siglos XVII y XVIII. De hecho, en Viena se encuentra una de las mayores colecciones espontáneas de monumentos de esta etapa escultórica y arquitectónica.

3. Porque se pueden recorrer los pueblos y ciudades colindantes. Normalmente, quién viaja a Viena durante varios días alquila un vehículo o bien e traslada en tren o autobús hacia las diferentes poblaciones colindantes. Principalmente, esto resulta típico debido a que los pueblos austriacos están considerados, junto con los holandeses y lo belgas, como los más característicos del centro de Europa.

4. Porque merece la pena ver la arquitectura de sus barrios. En las diferentes zonas de Viena se da una unión curiosa entre arte renacentista y barroco. Ambos son estilos artísticos muy diferentes ya que mientras el renacimiento es una búsqueda de esa armonía griega, de esas formas rectas y esculpidas en mármol, el barroco se basa en un estilo de formas principalmente recargadas.

5. Porque se tiene que ir a la ópera al menos una vez en la vida. Este punto es indispensable. No se debe olvidar, no obstante, coger los billetes por adelantado.

6. Porque merece la pena pasear a orillas del Danubio. El Danubio baña ciudades tan bellas como Budapest o Viena. Disfrutar de sus ventajas está en la mano de quién desee sacarle partido.

7. Porque es romanticismo. Los pequeños cruceros son una de esas opciones que se deben llevar a cabo al menos una vez en la vida. Los precios de una cena a estos efectos suele rondar los 80 euros.

8. Porque volar a Viena cada vez es más barato. Empresas como Vueling son la prueba fehaciente de que cada vez resulta más barato volar a esta ciudad (hace apenas unos cinco años, sus precios no eran tan asequibles).

9. Porque se puede encontrar alojamiento a muy buen precio.

10. Porque merece la pena ir al estadio de fútbol en el que ganó la selección en 2008. Esta es una razón más relacionada quizás con el hecho de que el fútbol sea del agrado del viajero aunque si hay algo que es cierto es que desde entonces no ha habido pocos peregrinajes improvisados en las inmediaciones del Ernst Happel.

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